Cuando tenemos un piso pequeño, no se puede desaprovechar ni un centímetro. Es primordial sacar partido hasta el último rincón de la casa y así tener un espacio funcional y bonito. La clave no pasa por sobrecargar el espacio, sino que se deben buscar los muebles y complementos idóneos para que se adecuen a la zona lo mejor posible.
Te descubrimos este piso pequeño de 75 m2 de Barcelona que ha dado un giro de 180º al abrir el salón, comedor y cocina, gracias a elementos a medida y decorativos que van como anillo al dedo. ¡No te lo puedes perder!